
La principal mejoría de este año con respecto a los anteriores para que la incidencia de las inundaciones haya sido menor estriba en la inversión en mantenimiento de redes; si bien, la Delegación de Medio Ambiente es consciente de la necesidad de ciertas inversiones importantes en nuevos equipos y servicios que serán gestionadas a través de la partida finalista del canon de construcción. De hecho ya ha sido anunciada la construcción de los colectores en El Pilar y la Avenida de la Música, que saldrá a licitación en los próximos días, así como la futura implantación del telecontrol en las estaciones de bombeo, actualmente en fase de licitación.
Tras las lluvias se han incrementado los trabajos a nivel preventivo con una mayor limpieza de las redes de saneamiento, ya que las aguas han arrastrado muchos elementos al interior de las tuberías. En cualquier caso, desde la empresa municipal, se ha destacado que “es francamente complicado prever puntos concreto de incidentes”, como los ocurridos en Complejo Atlántico, Novo Sancti Petri o calle San Félix, lugares éstos que, en los últimos días, no han sufrido incidencias de consideración”.
En cuanto a las soluciones que se plantean como alternativas a los episodios de averías en la carretera de La Barrosa, y, al margen de las paliativas, desde la empresa municipal Chiclana Natural se señaló que “es el momento de plantear una reforma considerable en el sistema de saneamiento de la Barrosa, ya que es un sistema que es claramente insuficiente y deja poco o ningún margen a soluciones mágicas”.
Especial mención merece la incidencia de la lluvia en las obras de construcción del nuevo parque público en la Laguna de la Rana Verde. Hasta el momento los daños ocasionados se han valorado en 100.000 euros, lo que va a provocar un replanteo de la obra, con el consiguiente retraso.